
Mi maestra Leo tomó de inmediato mi disposición y me surtió de los materiales necesarios: la pasta flexible, las pinturas oleo de los tonos necesarios, los modeladores, duya y pegamento.
Y literalmente manos a la obra: amasar y amasar y tratar de modelar. Primero hice las haditas, con la ayuda de mi maestra claro está. Después me pusé a hacer el ratón yo solita pero ¡cómo me hizo sufrir!. La masa se me cuarteaba justo cuando terminaba de darle la forma correcta a las piezas, luego al tratar de armarlo se me cayó y cuando quedó montado se cuarteó la masa.
No se nota pero tiene "varices" y no se sienta solito jiijijiji, ah y quedó inconcluso...
En fin, aprendí algo, la verdad me gustó mucho y el viernes próximo lo intentaré de nuevo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario